Equipo de Curas Villeros
1. El Poder Ejecutivo
ha propuesto el debate acerca de la despenalización del aborto. Este tema no
estaba en su plataforma electoral. El Ejecutivo anterior no solo no
propició este debate, sino que incluyó a las mujeres embarazadas en la
Asignación Universal por Hijo. Eso es un gesto concreto de una política pública
a favor de la vida.
2. Nuestras opciones
por “la vida como viene”, sin grises. Especialmente la vida amenazada en
cualquiera de sus formas. Por eso hemos hablado a favor de los inmigrantes, de la lucha por la justicia,
de que nadie a raíz de la desnutrición tenga su futuro hipotecado, que nadie
muera por enfermedades que podrían curarse, como por ejemplo la
tuberculosis. Por eso estamos en contra del gatillo fácil. Por eso hemos apoyado las manifestaciones de “Ni una
menos” contra los femicidios. Y a esta opción la confirmamos con acciones
comunitarias concretas, que realizamos en nuestros barrios para que se viva
bien, se viva con dignidad.
3. Como curas y religiosas desde la villa y barrios
populares, nuestra experiencia de vecinos, fruto de una consagración, es la de
haber aprendido de los villeros a amar y cuidar la vida. La cultura popular de
estos barrios nos ha mostrado una manera real de optar por la vida. Muchas
veces donde el Estado no llega, donde la
sociedad mira para otro lado, la mujer sola o atravesada por la marginalidad
encuentra en las redes de amor que se generan en nuestros barrios su ayuda
y su esperanza, para ella y sus hijos.
4. En esta línea hay muchos ejemplos de mujeres que saben
cuidar a los niños como si fueran sus propios hijos. Creemos que debería ser más sencillo el camino para adoptar un niño.
Somos testigos de que muchos matrimonios de la villa fueron marginados de la
posibilidad de adopción porque no tenían, por ejemplo, título de su vivienda.
5. Algunos planteos de otros sectores sociales —creemos que
este es uno de ellos— toman a los pobres como justificativo para sus
argumentos. Se habla de la tasa de mortalidad por aborto de las mujeres de los
barrios más pobres. Lo primero que hay
que hacer en nuestros barrios es luchar contra la pobreza con firme
determinación y en esto el Estado tiene las mejores herramientas. Con casi
un 30% de pobres —detrás de los cuales hay rostros e historias— hay discusiones
que debieran priorizarse.
6. Muchas veces miramos a los países poderosos y
“desarrollados” de nuestro mundo. En muchos de ellos está legislado el aborto.
Y en muchos casos se descarta así a los niños que van a nacer con Síndrome de Down. ¡Cuánto nos enseñan estos
niños a los que tenemos atrofiada la capacidad de amar! La lógica de los
poderosos, de los fuertes, que deciden sobre los que menos posibilidades
tienen, es la lógica dominante. Y esto también, de alguna manera, se traslada
al tema de la niña o niño por nacer.
7. A lo largo de cincuenta años este equipo de sacerdotes de
las villas, que se fue ramificando en otros lugares como la provincia de Buenos
Aires, ha sido testigo de muchas propuestas de muerte. Han muerto catequistas,
religiosos y sacerdotes por la Dictadura. Por el tráfico de armas y de drogas continúan las muertes de adolescentes y
jóvenes. No necesitamos agregar más muertes. Nuestros barrios necesitan
propuestas de vida digna. Y una sociedad que proteja al más débil.
Que la Virgen de Luján, Madre
del Pueblo, nos enseñe a cuidar de nuestra Patria, comenzando por los más
frágiles.
16 de marzo de 2018
P. José María Di Paola. Villa
La Carcova, 13 de Julio y Villa Curita. Diócesis de San Martín.
Mons. Gustavo Carrara. Obispo
auxiliar de la Arquidiócesis de Buenos Aires. Vicario para la Pastoral en
Villas de CABA
P. Juan Isasmendi, P. Eduardo
Casabal, P. Ignacio Bagattini. Villa 1-11-14. Arquidiócesis de Buenos Aires.
P. Lorenzo de Vedia, P. Carlos
Olivero, P. Gastón Colombres. Villa 21-24 y Zavaleta. Arquidiócesis de Buenos
Aires.
P. Guillermo Torre, P. José
Luis Lozzia, P. Marco Espínola. Villa 31. Arquidiócesis de Buenos Aires.
P. Domingo Rehin: Villa
Lanzone. Villa Costa Esperanza. Diócesis de San Martín.
Mons. Jorge García Cuerva.
Obispo auxiliar de la Diócesis de Lomas de Zamora.
P. Basilicio Britez. Villa
Palito. Diócesis de San Justo.
P. Nicolás Angellotti. Puerta
de Hierro, San Petesburgo y 17 de Marzo. Diócesis de San Justo.
P. Sebastián Sury, P. Damián
Reynoso. Villa 15. Arquidiócesis de Buenos Aires.
P. Rodrigo Valdez. Villa
Playón de Chacarita. Arquidiócesis de Buenos Aires.
P. Martín Carroza y P.
Sebastián Risso. Villa Cildañez. Arquidiócesis de Buenos Aires.
P. Pedro Baya Casal, P. Adrián
Bennardis. Villa 3 y del Barrio Ramón Carrillo. Arquidiócesis de Buenos Aires.
P. Joaquín Giangreco. Villa
Trujuy. Diócesis Merlo-Moreno.
P. Nibaldo Leal. Villa
Hidalgo. Diócesis de San Martin.
Carlos Morena, Mario Romanín,
Alejandro León, Juan Carlos Romanín, Salesianos, Don Bosco. Cecilia Lee,
misionera franciscana. Bea GmiItrowicz, misionera franciscana, Villa Itatí.
P. Antonio Mario Ghisaura.
Villa Tranquila. Diócesis Avellaneda- Lanús.
P. Alejandro Seijo: Villa
Rodrigo Bueno. Arquidiócesis de Buenos Aires.
P. Andrés Tocalini. Villa los
Piletones. Arquidiócesis de Buenos Aires.
P. Dante Delia. Barrio la Loma
de Roca. Diócesis de San Isidro.
P. Franco Punturo. Villa 20.
Arquidiócesis de Buenos Aires.
P. Omar Mazza. Villa Inta.
Arquidiócesis de Buenos Aires.