ALGO DE HISTORIA PARA LOS QUE CREEN
QUE EL MUNDO NACIÓ AYER
JAVIER GARIN - Noviembre 2019
Fundador del M.N.R., Víctor Paz Estessroro es considerado el
mejor presidente de la historia de Bolivia, el que la convirtió en un estado democrático y la sacó de la pobreza y
combatió fuertemente la discriminación contra los indígenas. También fue el
fundador del capitalismo de Estado boliviano.
En su primer gobierno (1952-1956)
inició la Revolución Nacional, que se convirtió en una de las revoluciones
sociales más importantes de América Latina en el siglo XX. Realizó la reforma agraria reconociendo la
propiedad de las tierras a los campesinos que las trabajaban. Instauró el voto
universal por primera vez en la historia de su país. Nacionalizó las empresas mineras, poniéndolas al servicio del
pueblo boliviano. Además, en su segundo gobierno (1960-1964) consolidó Yacimientos Petrolíferos Fiscales
Bolivianos (YPFB), inspirada en la YPF argentina.
En su cuarto gobierno, 1985-1989,
logró controlar la hiperinflación. Es considerado uno de los líderes
latinoamericanos más importantes, junto a Perón, Cárdenas y Vargas.
El
14 de mayo de 1952 ordenó la incautación de las minas de estaño de las
compañías Patiño, Hoschschild y Aramayo -el núcleo de La Rosca- con la acusación de haber
expoliado la riqueza nacional en beneficio propio y del extranjero. La medida
tenía carácter provisional, mientras una Comisión adhoc deliberaba sobre el
procedimiento de expropiación legal de las explotaciones. Poco después, el
presidente decretó el monopolio del
Estado sobre la comercialización de todos los minerales y trasladó las
responsabilidades de gestión al Banco Minero de Bolivia (Bamin), creado a
tal efecto.
El 2 de octubre instituyó también la
Corporación Minera de Bolivia (Comibol) como el ente encargado de administrar
las empresas intervenidas. Finalmente, el 31 de octubre, firmó el Decreto de
Nacionalización por el que el Estado adquiría los yacimientos y las
instalaciones del trío Patiño-Hochschild-Aramayo a cambio de sustanciosas
indemnizaciones. Las compañías extractoras medianas y pequeñas no fueron
expropiadas, lo que dejó en manos del capital privado una tercera parte de la
actividad minera en Bolivia.
El
21 julio, aprobó la ley de sufragio universal, que concedió los derechos de elección y elegibilidad a
todos los bolivianos mayores de 21 años sin exclusiones de sexo, raza o nivel
cultural, lo que multiplicó por cinco el censo electoral, que entonces ascendía
a 204.000 personas.
Coronando el programa revolucionario y
previa entrega de sus conclusiones por la Comisión correspondiente, el 2 de agosto de 1953 entró en vigor la
Ley de Reforma Agraria, que supuso la abolición de la servidumbre de los
indígenas del campo con el reparto de los latifundios convenientemente
parcelados a un millón de campesinos sin tierras. De nuevo, esta medida
típicamente socialista se ciñó a las grandes propiedades y afectó
preferentemente a las plantaciones de baja productividad. Los propietarios
afectados también tuvieron derecho a compensación.
El Gobierno de Paz buscó consolidarse
mediante la movilización de las organizaciones obreras y campesinas. Así,
alentó la pronta creación de la Central
Obrera Boliviana (COB) como la confederación sindical nacional y dotada de
fuero; con Lechín a su frente, la COB obtuvo puestos ministeriales en el
Gobierno y el derecho de veto en el seno de la Comibol, y desde el principio
representó el ala más radical y militante de la Revolución Nacional.
En su segunda presidencia, Paz hizo sancionar la Constitución de 1961,
que asentó los pilares de la Revolución Nacional: la propiedad pública de la
minería, la Reforma Agraria y el sufragio universal. Asimismo logró un
fenomenal éxito económico al aumentar el nivel de producción en el sector
minero más el desarrollo diversificado de las exportaciones no mineras,
significativamente las de hidrocarburos, produciendo en 1964 una tasa de
crecimiento del PIB del 7%.
En su cuarto gobierno debió llevar a cabo fuertes ajustes estructurales
eliminando déficit, negociando deudas y frenando una hiperinflacion del 23.500
por ciento (una de las más altas de la historia mundial, producto del
desgobierno de malo presidentes y de las sucesivas dictaduras.
A VER SI ESTUDIAN UN POCO,
MUCHACHITOS, QUE LA HISTORIA NO MUERDE.