Entrevista al filósofo italiano Diego Fusaro
SU LIBRO ES
ORIGINAL POR MUCHOS MOTIVOS. EL PRIMERO DE ELLOS: SIENDO USTED MARXISTA, SE
DESMARCA DE FORMA RADICAL DE LO QUE ES EL DISCURSO DOMINANTE EN LA IZQUIERDA
SOBRE SEXUALIDAD, IDENTIDAD Y AFECTIVIDAD. ¿CÓMO LLEGÓ A ESA POSICIÓN PERSONAL?
No creo que sea
una posición personal, porque si lo fuera sería poco interesante. Creo que es
una posición filosófica basada en fundamentos sólidos. La paradoja de la
izquierda fucsia y neoliberal de hoy radica en el hecho de que ha aceptado plenamente el mercado y el clasismo que lo
acompaña, y también las consecuencias dañinas del mercado. Aceptó la desregulación
económica y la desregulación antropológica, la precariedad laboral y el
precariado sentimental.
¿QUÉ ES EL NUEVO
ORDEN ERÓTICO AL QUE SE REFIERE SU LIBRO?
El nuevo orden
erótico no es más que liberalismo aplicado a la esfera sentimental, la fluidificación
y precarización del amor acorde con la fase flexible de acumulación
capitalista. Si la izquierda deja de interesarse por Marx, hay que dejar de
interesarse por la izquierda y seguir con Marx.
USTED DENOMINA,
PROVOCADORAMENTE, NEOLIBERTINAJE AL DISCURSO DE LA IZQUIERDA ACTUAL, Y LO
CONSIDERA DE NATURALEZA NEOLIBERAL E INDIVIDUALISTA.
La izquierda fucsia y neoliberal representa
la traición completa a Marx y a Gramsci, así como a la clase obrera. Comparte
la perspectiva neoliberal, según la cual la sociedad es una serie de átomos
que deben realizarse de acuerdo con sus caprichos individuales. En el terreno
de los sentimientos, esto se desarrolla como un nuevo orden erótico de
soledades que buscan el goce usando al otro como herramienta. El libertino utiliza al otro para disfrutar
sin límites y ve en la familia al enemigo principal porque la familia regula el
amor. De un modo análogo a como el liberal usa al otro para obtener
ganancias ilimitadas y ve al estado como el principal enemigo porque el estado
regula la economía.
LA SEGUNDA
SORPRESA, NO MENOS RADICAL, ES SU DEFENSA DEL AMOR DESINTERESADO Y
COMPROMETIDO.
El amor es una fuerza revolucionaria y
podríamos decir que anticapitalista por definición. Amar significa querer la
plenitud del ser del otro, sin compensación, sin interés egoísta, sin interés
personal. Volo ut sis, quiero que seas: ésta es la fórmula del amor según
Agustín de Hipona. En el amor de una madre por un hijo, o de un padre por una
madre, hay un amor desinteresado que vuelca la lógica mercantil que hoy
pretende ser la única válida en todos los ámbitos. El turbocapitalismo sin fronteras reduce la sociedad a un mercado
global: no acepta padres y madres, ciudadanos y ciudadanas, quiere ver
siempre, y en todas partes, consumidores desarraigados que se relacionan entre
sí según la lógica del do ut des, doy para que des, del mercado.
EL AMOR HA SIDO
VISTO SIEMPRE, Y TODAVÍA HOY, COMO LO ÚNICO QUE PUEDE SALVARNOS DE LA TRAGEDIA
DE VIVIR, PERO AHORA ESTÁ TAMBIÉN BAJO SOSPECHA.
El amor es una
fuerza vivificante, porque nos permite completarnos gracias al otro, alcanzar
una plenitud para ser superiores a través de la síntesis dual con el ser amado.
Entre otras cosas, también nos muestra cómo la antropología neoliberal es
falsa: el amor revela cuán incompletos somos en nuestra individualidad pues
para realizarnos necesitamos una relación vital con el otro. Es por eso que hoy el capital no quiere
amor, sino solo disfrute, que es más bien una forma de individualismo egoísta.
ES ESPECIALMENTE
LÚCIDA SU IDEA DE QUE EL AMOR HA SIDO REDUCIDO AL PLACER, AL PLUSGOCE, Y CON
ELLO SE HA CONVERTIDO EN MERCANCÍA.
Por supuesto, el
amor tiene que ver con el disfrute, pero no se reduce al disfrute. La sociedad
neoliberal separa totalmente el amor del goce y sólo permite que sobreviva el
segundo. ‘Debes gozar’, el imperativo del Marqués de Sade, se convierte en el
imperativo categórico de la civilización neoliberal. El amor es incompatible
con el capital, mientras que el goce lo expresa plenamente. El goce y el
consumismo se influyen dialécticamente: el libertino y Don Juan son
consumidores eróticos, que ven al otro solo como un instrumento y que siempre
buscan nuevos placeres según la lógica que Hegel habría llamado el “infinito
del mal”.
Otra Sorpresa Es
Su Apología Del Matrimonio Como Institución Sólida A Defender, En Tiempos De
Promoción Del Poliamor.
En Italia y en
Francia en los años 30, 40 y 50 del
siglo XX había carteles del Partido Comunista que decían “vota comunista,
defiende a la familia”. Después de todo, el proletariado era la clase
basada en la descendencia. Hoy la izquierda neoliberal fucsia, complementaria
de la derecha neoliberal azulada, se opone al matrimonio al igual que se opone
al Estado, viendo en ambos límites con respecto a la desregulación económica y
antropológica propia del capital.
¿Y POR QUÉ ES
IMPORTANTE DEFENDER EL MATRIMONIO?
El matrimonio representa el corazón de la
vida familiar ética, el amor que se transforma en un proyecto estable y que, al
engendrar hijos, se estructura en una nueva vida. El hecho de que la
izquierda se ría del matrimonio revela la pequeñez de la propia izquierda, que
se ha convertido en un baluarte del nihilismo relativista de la civilización
del capital y se ha convertido aún más en el tonto útil de los jefes sin
fronteras. Todo lo que quieren los amos de la derecha del dinero, los tontos
útiles de la izquierda fucsia lo defienden.
¿POR QUÉ QUERRÍA
LA DERECHA DEL DINERO DEBILITAR A LA FAMILIA?
La derecha del dinero quiere individuos sin
familia, es decir, sin ataduras éticas, y la izquierda fucsia de las costumbres
dice que la familia es homofóbica y represiva y que debe ser superada. Pero
es que la derecha del dinero quiere la economía sin la soberanía democrática
del Estado, y la izquierda fucsia dice que debemos vencer al Estado porque es
naturalmente fascista. Y así hasta el infinito.
Da risa, pero al
mismo tiempo pena, ver a jóvenes precarios y explotados que nunca podrán formar
una familia y que salen a las calles a manifestarse contra la familia,
revelando así su total subordinación al proyecto capitalista.
DEDUZCO QUE NO
CONSIDERA QUE LA IZQUIERDA DOMINANTE ACTUAL SEA LA VERDADERA IZQUIERDA.
Por supuesto que
no. La verdadera izquierda era la de la hoz roja y el martillo de Marx, Gramsci
y Lenin. Me identifico con aquello porque se basaba en la lucha por la
emancipación de la sociedad y contra el imperialismo. La nueva izquierda, la
izquierda simplemente representa la evaporación de la izquierda hacia el
neoliberalismo.
Esta es la razón
por la cual la izquierda no puede ser la solución hoy, sino que es una parte
integral del problema. Hoy no se trata de refundar la izquierda, se trata de ir
más allá de la derecha y la izquierda para fundar una nueva geografía de la
política y un nuevo proyecto de emancipación socialista que lleve adelante el
discurso de Marx y Gramsci en el contexto cambiante de la globalización
neoliberal. Derecha e izquierda son hoy
sólo los mayordomos del capital. Hoy en España el mayordomo lleva delantal
fucsia, mientras en Italia es azul. Pero absolutamente nada cambia para los
de abajo, es decir, para las clases trabajadoras y las clases medias. Por eso
necesitamos fundar una política de abajo y para abajo, para el pueblo y los
trabajadores.
LA IZQUIERDA
REALMENTE EXISTENTE INTERPRETA ESE NEOLIBERTINAJE COMO LA MÁXIMA EXPRESIÓN DE
LA LIBERTAD, Y COMO UNA CONQUISTA. USTED LO VE COMO UNA TRAMPA Y UN PROBLEMA.
El
neolibertinismo, que es el neoliberalismo aplicado a la erótica, no representa
la libertad sino el triunfo del capricho individualista del consumo: el
capricho individual es la forma más baja de libertad, como ya dijo Hegel. La
verdadera libertad se da en una sociedad de individuos igualmente libres que se
relacionan en solidaridad y comunidad. La monadología neoliberal defendida
tanto por la derecha como por la izquierda nos presenta en cambio un agregado
de átomos que se relacionan entre sí de acuerdo con la lógica del beneficio
económico y erótico. Como nos enseña la historia de Don Juan estudiada por
Kierkegaard, Don Juan se cree libre cuando en realidad es una contradicción
viviente porque busca algo nuevo que es siempre lo mismo, y está atrapado en
esta mecánica de goce continuo que nunca puede encontrar la paz. Por tanto, en
mi opinión, es preferible la vida ética
del padre de familia estudiada por Kierkegaard, que estabiliza su propia vida
en el amor y hace una elección estructurada y planificada: la precariedad, el
precariado, nos obliga a vivir como Don Juan sin estabilidad en ningún ámbito,
ni siquiera el sentimental.
LLAMA TAMBIÉN LA
ATENCIÓN SU CONTUNDENTE CRÍTICA AL TRANSGENERISMO, QUE, COMO SABRÁ, HA DIVIDIDO
AL MOVIMIENTO FEMINISTA EN ESPAÑA, CON UNA PARTE QUE SE OPONE A LA LEY DE
AUTODETERMINACIÓN DE GÉNERO QUE ACABA DE APROBARSE.
Es significativa
la exaltación mediática permanente de las personas transgénero en la sociedad
de mercado: el capitalismo no tolera la
existencia de reglas y normas fijas, ni siquiera las naturales, porque su
esencia hoy es la desregulación. El capitalismo de hoy ya no es autoritario,
sino anárquico y de consumo liberalizado, como Pasolini ya había comprendido.
El transgénero es celebrado como la quintaesencia del individuo anarquista que
rompe todas las fronteras y que también representa la esencia de un capitalismo
sin fronteras.
Además,
representa la esencia de un individuo unisex que, como un superhombre, tiene
una voluntad ilimitada de poder y que decide todo soberanamente, sin tener que
respetar tabúes, leyes, límites ni fundamentos. La idea de que el individuo pueda decidir su propio sexo es un simple
disparate, ya que el sexo nos es asignado por la naturaleza, incluso antes de
que nazcamos, a través de los cromosomas. La violencia contra la naturaleza
y el ser como tal representan la esencia de la visión capitalista de que todo
está disponible para la voluntad tecno capitalista de poder.
LLEGA A DECIR
QUE EL TRANS ES LA FIGURA QUE MEJOR DEFINE EL MARCO IDEOLÓGICO DEL CAPITALISMO
ACTUAL. ¿SERÍA UNA DE LAS RAZONES POR LAS QUE ESTÁ SIENDO TAN APOYADA Y
PROMOCIONADA?
Sí, precisamente
por eso lo transgénero se convierte en objeto de permanente celebración
mediática: mientras que el padre de familia o la madre de familia son burlados
por la sociedad del espectáculo y presentados como modelos anticuados y
ridículos, el transgénero es presentado como la vanguardia de la sociedad libre
de individuos progresistas que han traspasado todas las fronteras y que ya no
tienen leyes de la naturaleza a las que referirse. Se presenta el movimiento
trans como revolucionario simplemente porque sirve a la lógica del
turbocapitalismo.
EN SU LIBRO
DISTINGUE DOS MOMENTOS EN EL DESARROLLO DEL CAPITALISMO EN RELACIÓN CON EL
ASUNTO DE LA SEXUALIDAD Y LA FAMILIA.
Sí, mi libro
distingue dos momentos fundamentales: el
capitalismo en la modernidad se basa en la familia y el estado nacional
soberano, pero el turbocapitalismo desde los años sesenta tiene como objetivo
superar tanto a la familia como al estado nacional soberano para producir un
modelo de turbocapitalismo anarquista basado en el ius sive potentia, el
derecho como poder, a escala planetaria. Ya no necesita la familia, ni el
Estado y todo lo que Hegel llamó las raíces éticas, porque reduce el mundo
entero a un mercado, a un ‘espacio abierto’ de libre circulación de mercancías
y personas mercantilizadas, el condominio exclusivo de la clase plutocrática
internacional sin fronteras.
PERO, EN ÚLTIMA
INSTANCIA, TODO ES UNA DERIVA DEL HECHO DE QUE SOMOS LA PRIMERA CIVILIZACIÓN
ESTRICTAMENTE MATERIALISTA DE LA HISTORIA…
Ciertamente nos hemos convertido en una
civilización de puro materialismo ateo y cínico. La cantante Madonna cantó
‘I am a material girl/ in a material world’ (soy una chica material en un mundo
material), describiendo así perfectamente la esencia del materialismo
capitalista.
ADAM SMITH
RECONOCÍA QUE EL CAPITALISMO ES UN SISTEMA CIEGO, SIN MORAL, Y POR ESO ERA
IMPORTANTE QUE LA SOCIEDAD TUVIERA CONVICCIONES MORALES Y RELIGIOSAS FIRMES QUE
HICIERAN DE FRENO.
En Adam Smith ya
encontramos plenamente lo que, en mi opinión, es el error del pensamiento
conservador de derecha contemporáneo, y que podemos ver, por ejemplo, en un
pensador interesante como Roger Scruton. El
pensamiento conservador quiere defender tradiciones, identidades y culturas: y
estoy totalmente de acuerdo con ello. Sin embargo, acepta el libre mercado, que
es precisamente lo que causa la destrucción de la identidad de las tradiciones
y culturas. En otras palabras, el pensamiento conservador de la derecha
combate los efectos y cultiva las causas. La única manera de ser verdaderamente
conservador es luchar contra el libre mercado. Por esa razón, hoy debemos ser revolucionarios en las ideas políticas y
económicas y conservadores en los valores éticos y morales. Más allá de la
derecha y la izquierda, o si lo prefiere, tanto de derecha como de izquierda,
tomando lo mejor de cada una y descartando lo peor.
¿EN QUÉ MEDIDA
EL DERRUMBE DE LA CRISTIANDAD (ENTENDIDA COMO COSMOVISIÓN DOMINANTE EN
OCCIDENTE) HA CONTRIBUIDO A LA DERIVA EN LA QUE NOS ENCONTRAMOS?
Reflexioné sobre
el cristianismo en mi último libro, titulado El fin del cristianismo. La muerte
de Dios en el tiempo del mercado global y el Papa Francisco. Mi tesis básica es que la sociedad del
capitalismo global o turbocapitalismo ya no necesita la religión de la
trascendencia y debe descartarla como un elemento perturbador para su
reproducción. En la modernidad, el poder capitalista ha utilizado el
cristianismo para legitimarse de varias maneras. Hoy el capitalismo se basa en
el nihilismo relativista y, por lo tanto, debe matar a todas las figuras de lo
sagrado y lo trascendente.
El cristianismo nos enseña que el otro es
un hermano porque, como nosotros, es una criatura de Dios, nos enseña que el
templo es sagrado porque no está a la venta, nos enseña que Dios da leyes que
los hombres deben respetar, nos enseña que somos seres comunitarios hechos para
la fraternidad. Para el discurso neoliberal nada debe ser sagrado porque
todo debe estar a la venta, el otro no es un hermano sino un competidor, la
sociedad no existe, sino que solo existen los individuos, la hermandad es una
ficción porque en realidad hay competencia. Es por eso que hoy no estamos en
una guerra de religión, sino que estamos en una guerra contra la religión
librada por el nihilismo capitalista contra la religión de trascendencia, que
en Europa es el cristianismo.
¿QUÉ PAPEL CREE
QUE PUEDE JUGAR LA RELIGIÓN EN EL ESCENARIO ACTUAL, EN EL QUE INCLUSO UN PAPEL COMO
BENEDICTO XVI AUGURABA QUE LA IGLESIA CATÓLICA VOLVERÍA A SER PEQUEÑA?
En mi opinión, la Iglesia Católica se
enfrenta ahora a una encrucijada fundamental: la neoiglesia postcristiana de
Bergoglio representa la evaporación del cristianismo, o si se prefiere, la
disolución del cristianismo en la civilización relativista del consumo, ya que
en Bergoglio ya no hay ninguna referencia a la trascendencia y lo Divino, sino
que solo existe el discurso único de la globalización capitalista. La
alternativa es la iglesia de Ratzinger, el pequeño remanente que quiere
agradar a Dios y no al mundo y que, por lo tanto, éste es el punto fundamental,
entra en conflicto con el mundo, se encuentra en oposición y se ve obligado a
luchar contra un mundo nihilista que ya no quiere el cristianismo. El verdadero
cristiano de hoy debe oponerse al capitalismo y al nihilismo, o no ser ya cristiano, como ocurre con gran
parte del cristianismo que sigue a Bergoglio hacia el precipicio del nihilismo
relativista. Este es el tema fundamental que desarrollé en mi libro, El fin
del cristianismo.
EN VARIAS
OCASIONES HA HABLADO DE LA NECESIDAD DE ACABAR CON LA ECONOMÍA DE MERCADO Y
APOSTAR POR EL SOCIALISMO, PERO LOS RESULTADOS DEL SOCIALISMO REAL NO HAN SIDO
DEMASIADO SATISFACTORIOS, Y LOS EJEMPLOS ACTUALES (CUBA, VENEZUELA…) RESULTAN
MUY POCO ESTIMULANTES, PARA EMPEZAR POR SU FALTA DE RESPETO DE LA LIBERTAD Y
LOS DERECHOS HUMANOS.
El hecho de que
las curas para la enfermedad del capitalismo no hayan sido del todo
satisfactorias no debería impedirnos intentar de nuevo curar el capitalismo. Al
igual que el hecho de que los tratamientos contra el cáncer a veces no tengan
buenos efectos no debería impedirnos buscar nuevos tratamientos. Usted menciona
Cuba y Venezuela, ciertamente no estados perfectos y en gran medida
perfectibles: pero el hecho de que no sean perfectos no puede usarse como
argumento para justificar la sociedad de mercado, o los gobiernos occidentales
en general, serviles como están al imperialismo estadounidense y la
cosificación capitalista. Al menos Cuba
y Venezuela son estados soberanos, mientras que los estados europeos son ahora
colonias de Washington, simplemente obedeciendo como esclavos las órdenes del
imperialismo estadounidense.
USTED PARECE
PRESTAR INSUFICIENTE ATENCIÓN A LAS CAUSAS CULTURALES, E IDEOLÓGICAS, QUE
PUEDEN ESTAR DETRÁS DE LA MUTACIÓN DEL MODELO DE ECONOMÍA DE MERCADO. ESTOY
PENSANDO EN LA REVOLUCIÓN CULTURAL, QUE COLOCA AL DESEO DEL INDIVIDUO EN EL
CENTRO; LA CULTURA JUVENIL Y ANTIAUTORITARIA QUE SURGE EN TORNO AL ROCK; LA
REVOLUCIÓN SEXUAL AUSPICIADA POR EL INVENTO DE LA PÍLDORA; Y LA GRAN EXPLOSIÓN
DE MAYO DEL 68.
En mi opinión, Mayo del 68 fue un
movimiento capitalista de emancipación, no un movimiento de emancipación del
capitalismo: el capitalismo estaba pasando de la fase autoritaria burguesa a la
fase hedonista del libre consumo y la liberalización individualista de las
costumbres y el consumo. El 68 propone un modelo de liberación que
coincidía con el nuevo espíritu del capitalismo: prohibido prohibir,
disfrutemos ilimitadamente, todo y ya. Son los mismos lemas de la sociedad de
mercado contemporánea. 68 representa el
año en que no se golpea al capitalismo, sino a la burguesía como clase con su conciencia
infeliz potencialmente anticapitalista, y con su propio panteón de valores
no mercantilizables y puntos sólidos incompatibles con un capitalismo de libre
consumo indiferenciado.
DADAS LAS
FUERTES RAÍCES QUE SOPORTAN ESTA IDEOLOGÍA NEOLIBERTINA Y SU UTILIDAD PARA EL
SISTEMA ACTUAL ¿CÓMO VE EL FUTURO? ¿HAY MOTIVOS PARA LA ESPERANZA?
Para impugnar la
globalización capitalista primero debemos pensar de otra manera, como dice el
título de mi libro Pensar diferente. No
creo que la salvación venga ni de la derecha ni de la izquierda. La única
salvación consistirá en ir más allá para proponer nuevos mapas filosóficos y
políticos. Su estructura fundamental se basa en la dicotomía arriba y
abajo: derecha e izquierda representan el interés de lo de arriba frente a lo
de abajo, escenificando una alternancia sin alternativa en la que el camarero
azulado y el fucsia se alternan para llevar a cabo las órdenes impuestas desde
arriba por la plutocracia neoliberal.
Gramsci diría
que hay que ir al pueblo, es decir, mirar desde abajo y hacia abajo. Hoy debemos ser revolucionarios en economía
y política y conservadores en ética y valores. Las dos categorías políticas
fundamentales deben ser soberanía y pueblo. Pero la soberanía del Pueblo existe en el Estado, así que para que
exista la soberanía del Pueblo debe existir la soberanía del Estado. Esta
es la razón por la cual los amos liberales han estado deconstruyendo la
soberanía popular durante años deconstruyendo la soberanía de los estados
nacionales. Y esto es para que los lugares de decisión soberana pasen de los
parlamentos nacionales a organismos supranacionales como el BCE o el Fondo
Monetario Internacional.
¿O LA UNIÓN
EUROPEA?
La Unión Europea
representa un ejemplo de libro de esta supranacionalización
mediante la cual se quita la soberanía del Estado nación para eliminar la
soberanía del pueblo en el Estado nación. Por esta razón, como también dice
Manolo Monereo, la lucha de clases en Europa hoy es ante todo una lucha contra
la Unión Europea y sus instituciones neoliberales. El proyecto es ambicioso y
solo estamos al principio.
ESA LUCHA ¿PASA
POR EL DESMANTELAMIENTO DE LA UNIÓN EUROPEA O POR SU REFORMA?
Mi posición
respecto a la Unión Europea la he dejado escrita en mi libro Europa y el
capitalismo. Allí sostengo que debemos
abandonar la Unión Europea y la eurozona lo antes posible. Cuando un
rinoceronte comienza a correr y se prepara para cargar, lo único inteligente
que se puede hacer es apartarse de su camino, en este caso salir de la Unión
Europea lo antes posible, antes de verse abrumado y seguir el camino de la
desventurada Grecia. La Unión Europea es un proyecto de simple dominación del
capital financiero contra las clases medias y trabajadoras, el triunfo del
capitalismo financiero. La Unión Europea niega la idea de Europa. Cualquiera
que ame la historia y la civilización europeas debe oponerse a la Unión Europea
y a su destrucción de identidad y derechos.
FUENTE: vozpópuli, a través de El Viejo Topo.