27/9/16 - Jorge Rachid
1- Así se
titula el libro del Semiólogo del siglo XX Umberto Eco, quien dedicó su
investigación, desde los años 60 a describir los mecanismos de manipulación
informativa, con fines políticos, comerciales o de control social, que ejercían
los medios de comunicación masiva, cuyo auge de entonces, hoy parece un juego
de niños, comparado con la extensión de redes y globalización de la
información.
2- Quienes con
visión estratégica desde entonces, consolidaron su presencia mediática en el
mundo de la mano de personajes que con el correr de los años, se constituyeron,
a nivel mundial, en verdaderos factores de poder. Los Magneto y Mitre en
nuestro país, junto a los Turner CNN de EEUU, Azcárraga de Televisa México,
Murdoch inglés, Berlusconi italiano y Maxwell entre otros, quienes junto a
medios gráficos hegemónicos comenzaron a ser protagonistas globales de la
desinformación.
3- Esta
circunstancia fue utilizada en diferentes etapas por sectores políticos que se
sumaron al montaje del espectáculo de la vidriera, que da visibilidad a cambio
de ser peones de los intereses de los grupos económicos dominantes, que van
determinando quien es quien, en cada etapa en aquella memorable definición,
título de otro libro de Umberto Eco “Apocalípticos e integrados”, definiendo
los “políticamente correctos”, estigmatizando aquellos que no acuerdan con
ellos.
4- Fueron esas
maniobras la que con los años forjaron una lógica masiva de construcción del
pensamiento que llevó a la cultura neoliberal, desde 1976 con afianzamiento en
los 90, que contraponía lo público, definido como atrasado, inútil, incapaz y
corrupto, a lo privado, comandado por CEOS blancos y rubios, hombres y mujeres
de bien, con fortunas personales hechas al calor del esfuerzo y sacrificio
personal y si venían de sectores humildes mejor aún, para afianzar el
individualismo. Sí se puede….!
5- Esa ruptura
de la conciencia colectiva permitió desde entonces, la penetración masiva,
brutal de los sectores empresariales de lucro, convirtiendo en negocios derechos
sociales que hasta entonces estaban afianzados en la comunidad nacional, como
parte insoslayable del modelo social solidario de los años 50, cuando el
peronismo logró afianzar los derechos, incluso en el marco político
institucional con la Constitución de
1949, todo barrido por esta nueva lógica posmoderna.
6- Así fue como
masivamente se instalaron como verdades reveladas que la educación privada, es
mejor que la pública, aunque siguen cantando loas al Sarmiento educador que
constituyó la enseñanza obligatoria e igualitaria, único acierto del
sanjuanino. Lo mismo con la medicina, que de social y solidaria, se convirtió
en instrumento de penetración del negocio más espurio y escandaloso de los
tiempos modernos. La privatización de los bienes del estado, capital acumulado
de generaciones de argentinos, fue rematado en nombre de integrarnos al mundo
de los negocios globales.
7- De ahí
inferimos que la construcción de los escenarios políticos, tienen como
fundamento profundo un conjunto de intereses globales que operan a escala
internacional, construyendo escenarios de una lógica perversa. Así en nuestro
país se presentó como una cuestión moral pagarle a los Fondos Buitres,
repudiados a nivel mundial y criticando a nuestra Presidenta y a nuestro país,
como abyectos de la comunidad internacional. Una falacia más.
8- Como la de
los Buitres, podemos hoy observar la naturalización de la comunidad de CEOS de
empresas privadas como Ministros de la Nación, cuyo conflicto de intereses es
soslayado por los protagonistas y los medios, como una nueva lógica de corregir
los desvíos “populistas” del peronismo, que favorecían al distribución de la
riqueza, originando con ello, según los medios un aislamiento de nuestro país,
por aplicar políticas heterodoxas, en un mundo que exige, según ellos,
previsibilidad económica global, borrando los intereses nacionales.
9- De ahí que
el tema Soberanía, pasa a ser un tema menor, en esa lógica de construcción del
pensamiento, ya que el nuevo escenario impone la sumisión absoluta a los
dictados de los organismos internacionales y los dueños del poder sentados en
el Consejo de Seguridad de la UN, con derechos absolutos de veto a cualquier
iniciativa regional o nacional que plantee políticas soberanas e independientes
de cualquier tutelaje. Por eso volver a tener auditorías del FMI o políticas
exigidas por el Banco Mundial o la OMS, o afianzar el colonialismo inglés en
Malvinas, es todo lo mismo, en función de las “metas de inflación”, que
necesitan lluvia de inversiones para llevarse a cabo.
10- El peronismo con su concepción doctrinaria consiguió
penetrar en la cultura nacional constituyendo identidad soberana, a partir de
abarcar al conjunto de los intereses nacionales confrontados con los modelos
dependientes, que propone el neoliberalismo, constituyendo una barrera social y
política a la penetración imperial y al salvaje avance de los negocios
privados, en un esquema mundial de financiarización, que confronta con los
modelos productivos y del trabajo del mundo Multipolar, cuya expresión en la
región es la constitución del UNASUR, que se intenta desmontar desde el
macrismo.