El pago de intereses de las LELIQ y la Deuda iguala a todo el
gasto del Gobierno Nacional
Por Mario Cafiero (Ingeniero industrial – ex diputado nacional) – 31/7/2019
El
grado de desmesura o verdadera locura en que ha caído el Gobierno de Macri lo
demuestra este gráfico. Allí salta a la vista que el gasto en intereses de la
deuda por parte de Tesoro y de las LELIQ por parte del Banco Central, suma 1,46
billones de pesos, y que ello representa más que todo el gasto de
funcionamiento del Gobierno Nacional, que suma 1,42 billones. Equivaliendo
además al 73 % del monto destinado a Seguridad Social.
Actualmente
el monto neto de las LELIQ según
informa el Banco Central, trepa a 1,19 billones de pesos, equivalentes al
cambio actual a 27.197 millones de dólares. Que crece semanalmente como una
bola de nieve al 100 % anual, porque lo que se paga de intereses, vuelve a
esterilizarse como Lelik.
Con
la tasa del 60 % anual fijada por el Banco Central, ello representa un pago de intereses diarios de 1.956
millones de pesos o 44 millones de dólares. Lo que a lo largo del año
trepará a un monto de 714.079 millones de pesos, o 16.318 millones de dólares
al cambio actual.
Si
consideramos el período que va desde el
inicio del gobierno de Mauricio Macri hasta ahora, o sea en sus casi 4 años de
gestión, lleva gastados más de 45.000 millones de dólares en intereses de
las LELIQ. Un promedio de 1.100 millones de dólares por mes o sea 37 millones de dólares por día.
Un negocio increíble
para los bancos y la especulación financiera, Máxime si uno recuerda que el motivo del desguace y
privatización de la red de ferrocarriles argentinos, eran porque generaban un
déficit de un millón de dólares por día. Registrándose actualmente un pago de
intereses equivalentes a 44 redes de ferrocarriles.
O
si lo relacionamos con un icono de la corrupción como lo del Sr. López
revoleando bolsos, las LELIQ serían un revoleo desde el Banco Central a los
bancos equivalente a 5 veces por día lo del Sr. López, durante todos los días y
todos los meses. O sea una lesión al erario público casi dos mil veces mayor.
Sin embargo, nada de ello lo refleja la gran prensa y los medios, permitiendo
que los elefantes pasen por la puerta del bazar sin que la opinión pública se
escandalice.
Una
forma más clara de poner en evidencia esta locura financiera amarilla, consiste
en comparar el pago de intereses de la Deuda
Publica y de las LELIQ, que trepa a 1.459.731 millones de pesos ($ 1,46
billones) con todo el gasto de
funcionamiento y capital del Gobierno Nacional, que monta 1.417.882
millones de pesos ($ 1,42 billones). Tal como se puede apreciar en la siguiente
planilla, en la que se debe descontar de su Subtotal el Servicio de la Deuda
Pública.
Datos:
https://www.minhacienda.gob.ar/onp/presupuestos/2019
Dicho
monto de 1,46 billones de pesos representa además el 73 % de los 2,0 billones
de pesos destinados a Seguridad Social,
que cubren desde las jubilaciones y pensiones de la ANSES, hasta las AUH
(Asignación Universal por Hijo).
También
equivalen a siete veces el Presupuesto destinado en el 2019 al Ministerio de Educación. A entre nueve y diez veces
el presupuesto de Ministerio de Hacienda o de la Presidencia de la Nación. A
doce veces el presupuesto del Ministerio de Salud y Desarrollo Social.
A
entre trece y quince veces los presupuestos de Seguridad, Defensa, o
Transporte, respectivamente. A 23 veces el presupuesto del Ministerio del
Interior, Obras Públicas, y Viviendas. A 31 veces el presupuesto del Poder
Judicial. A 39 veces el presupuesto del Ministerio de Producción y Trabajo.
A
49 veces el presupuesto del Ministerio de Justicia. A 56 veces el presupuesto
del Poder Legislativo. A 88 veces el presupuesto del Ministerio Público Fiscal,
y a más de 100 vedes el presupuesto del ministerio de Relaciones Exteriores y
Jefatura de Gabinete respectivamente.
EL CEPO DE LAS LELIQ Y
LAS GANANCIAS POR LA DEVALUACIÓN DEL BCRA
Las
LELIQ son en realidad un “cepo al peso”, con el que Macri sustituyó el “cepo al
dólar”. Es un “cepo al peso” porque mediante una exorbitante tasa de interés se
absorben pesos de la circulación monetaria. La promesa era que con las LELIQ…
¡se iba a controlar la inflación! .
Además
las LELIQ provocan iliquidez, por la falta de pesos, y esta es la causa
principal de la caída vertiginosa de la actividad económica industrial y comercial.
Las LELIQ entonces, tienen un enorme costo para el Estado y además dañan al sector privado, dado que provocan
la caída del trabajo y producción.
Su
pago se solventa con las ilusorias ganancias contables que las devaluaciones
del peso le deparan al Banco Central, las que a su vez causan una enorme
penuria social, infligiendo así un doble sufrimiento a la sociedad.
Los
balances del Banco Central revelan claramente el origen de los supuestos e
ilusorios fondos contables provenientes de las devaluaciones, y su aplicación
al pago de intereses de las Lebac ahora LELIQ.
En
el año 2016 pagó intereses por 163
mil millones de pesos, y obtuvo ganancias contables por la devaluación por 212
mil millones de pesos, con una ganancia del ejercicio de 67 mil millones. En el
2017 el pago de intereses trepó a
233 mil millones de pesos, contra una ganancia contable por las devaluaciones
de 137 mil millones de pesos, lo que le deparó una pérdida de 67 mil millones,
e hizo que su patrimonio se redujera al monto insignificante de 7 mil millones.
Mientras
que en el 2018, el pago de intereses
trepó a 390 mil millones de pesos, y las supuestas ganancias contables, por las
enormes devaluaciones que hubo ese año treparon, a 789 mil millones de pesos.
Lo cual a costa del malestar de los argentinos, le deparó una ganancia neta del
ejercicio de 576 mil millones de pesos, que elevó su patrimonio neto a 584 mil
millones, multiplicándolo 77 veces respecto el del ejercicio del año anterior.
Actualmente
con los siderales pagos de intereses de las LELIQ en un marco de estabilidad
cambiaria, el patrimonio neto del Banco
Central se redujo un 40 % respecto el máximo alcanzado en el año. Razón por
la cual la gran pregunta es hasta cuándo podrá seguir pagando el Banco Central
los descomunales intereses de las LELIQ, sin incurrir en nuevas grandes
devaluaciones, o pedir su quiebra.
Mauricio Macri como
presidente vuelve a repetir su pasado como empresario. Sus propuestas empresarias fueron
ruinosas para el grupo de su padre Franco. Con el “negocio” del Correo
Argentino llevó al borde la quiebra al grupo Socma. Ahora está llevando a la
quiebra a la Argentina y de yapa al FMI su principal acreedor, que
irresponsablemente dejó que se fugara todo lo que prestaba.
En
lugar de divagar sobre Barreda, cuchuflito, o pindonga, como hacen los grandes
medios, los argentinos necesitamos sincerar la realidad económica. Para eso
hacen falta dirigentes que hablen con la verdad y que destapen la olla, no
importa del tamaño que esta sea. Y hacer
un acuerdo entre el sector del trabajo y del capital productivo para que
Argentina salga de la trampa de la
especulación financiera.