Conmovida por el mensaje de
abandono del rescate de la tripulación del Ara San Juan. El pedido desesperado
de los familiares y amigos solicitando por favor ante los medios que no los
dejen de buscar. La sensación de estafa con el montaje de un operativo monumental,
con equipo de avanzada internacional que retorna a los 3 días de zarpar. No sé,
quizás uno opina de bruto, con el mismo sentido común que alerta cuando te
están cagando.
A esta altura, cuando se ve
cómo se entreveran las cosas, la verdad parece que se pianta para nunca más
volver…
Macri, mientras tanto
casualmente, mandaba mensajes de alegría por las redes sociales por la
“presidencia” del G20.
La topadora de Cambiemos nos
regaló una semana a pura represión y de yapa media sanción a la reforma previsional,
un pasito más hacia el ajuste brutal a los jubilados.
Una buena: el pueblo
trabajador se encontró de vuelta en las calles. Aunque se desbordó la plaza y
los alrededores, faltaron unos cuantos, a los que seguiremos esperando en el
deseo profundo y sincero de Unidad.
Entre tantas malas, pensé en
ofrendar algo al ARA San Juan y su destino trágico. En cuánto nos cuesta pensar
como sociedad la necesidad de Fuerzas Armadas que verdaderamente defiendan la
Patria y no un antimilitarismo vacío, propio del pensamiento colonial.
Y también pensé que la
valentía y la vocación se premian con orgullo y no con lástima.
y salió esto:
No me busquen
No me encuentren
Aquí me quedo.
En las entrañas profundas de
la Patria
En el azul saqueado
Más allá de las mareas bravas
En el abismo remoto
de las aguas profanadas
Mi silenciosa custodia
Aquí se queda
Muda de palabras
Desde aquí los vemos amordazar
nuestras hermanas secuestradas
Esperando emerger en la
justicia
de la definitiva recuperación.
No me busquen.
No me encuentren.
Aquí me quedo.
Llegarán los días de los
abrazos
y les contaremos la historia
de la Nación encadenada
con poquito la defendíamos
de la lacra agazapada
Adentro mío
todas las tonadas
Todas las formas de la Patria
Arcilla Noble
por las aguas modelada
y los patanes que nos venden
¿Qué entienden de amor a la
tierra,
de un alma soberana?
Desde lo mas hondo
brotará el estandarte
del país liberado
Zarparemos de regreso cuando
la brújula del pueblo
señale el fin de las horas de
la infamia
Mientras tanto
No me busquen
No me encuentren
Aquí me quedo.